Descripción
La CLINDAMICINA es bien absorbida por vía oral, con una biodisponibilidad del 90%. Por vía intramuscular, alcanza su concentración máxima en un intervalo de 2.5 a 3 horas. Sin embargo, su absorción tópica es limitada, aunque se pueden detectar pequeñas concentraciones en la orina. La concentración máxima depende de la función hepática, siendo de 8.3 mcg/ml en personas sanas y hasta 24 mcg/ml en pacientes con insuficiencia hepática.
En cuanto a su distribución, aproximadamente entre el 60% y el 95% de la dosis de CLINDAMICINA se une a proteínas. Se distribuye ampliamente en tejidos como los huesos, las secreciones bronquiales, las trompas uterinas, el intestino, los líquidos pélvicos y peritoneales, la placenta, la pleura, el esputo y el útero.
La CLINDAMICINA experimenta un intenso metabolismo hepático, generando dos metabolitos importantes: el sulfóxido de CLINDAMICINA y el N-dimetil-CLINDAMICINA. Su excreción se produce principalmente a través del riñón, llegando a valores cercanos al 30%.